Si quieres que tu sistema de aire acondicionado te dure mucho tiempo en perfectas condiciones y sin consumir más de la cuenta es necesario realizar un mantenimiento periódico revisando los puntos clave del equipo. Con una sencilla revisión de forma regular se previenen la mayoría de problemas, como los malos olores, la pérdida de potencia o el consumo excesivo.
Hoy vamos a centrarnos en cómo hacer el mantenimiento a un equipo de aire acondicionado de pared, que es el más común en los hogares y en los pequeños negocios. Para las revisiones más complejas y para las de los equipos de mayor potencia (como los industriales) se debe contactar con un servicio profesional certificado para cumplir con el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios 2013 (RITE).
Limpiar los filtros
Unos filtros limpios son la base de un buen mantenimiento del aire acondicionado. Los filtros se encuentran en la unidad interior y se pueden extrae con facilidad. Los filtros se lavan con agua tibia y unas gotas de jabón, se aclaran y se dejan secar antes de colocarlos de nuevo. Si están muy deteriorados se deben sustituir por unos nuevos.
Limpiar la unidad interior
Aprovechamos que hemos retirados los filtros para limpiar la unidad por dentro. Esto se debe hacer rociando con agua mezclada con un par de gotas de lejía, evitando mojar los circuitos. El agua sucia caerá en la bandeja de condensados, que retiraremos y limpiaremos también. Para que todo el interior quede bien seco, ponemos el equipo en modo ventilación durante un tiempo.
Limpiar la unidad exterior
La unidad exterior acumula mucha suciedad, polvo, hojarasca, etc. Ya que, excepto las unidades centrífugas, esta parte del equipo no tiene filtros la suciedad exterior se acumula en la batería de intercambio, en las rejillas metálicas. Para eliminar todo rastros de suciedad lo mejor es emplear un compresor de aire. Si no disponemos de uno podemos emplear un cepillo o una brocha, pasándolo con cuidado por todas las láminas.
Desinfectar el aire acondicionado
Una vez limpios los intercambiadores y los filtros podemos emplear un producto especial para desinfectar el aire acondicionado (ver ejemplo). Así, evitaremos que proliferen hongos, bacterias y ácaros perjudiciales para la salud. Son muy fáciles de aplicar, ya que basta con rociar el interior de la unidad con ellos y dejarlos actuar.
¿Cada cuánto tiempo?
Ésta es la pregunta que se hacen la mayoría de usuarios de aire acondicionado. No hay una frecuencia exacta para realizar el mantenimiento puesto que depende de cuánto se use el equipo. No es lo mismo el aire acondicionado de una vivienda de verano que el de un local comercial abierto muchas horas al día. En términos generales, se recomienda limpiar y desinfectar todo el equipo una vez al año como mínimo. Lo idóneo es hacerlo cada seis meses, cuando pasamos de modo frío a modo calor y a la inversa.
Evidentemente, si el equipo de usa de manera intensiva, el mantenimiento se debe hacer con más frecuencia, unas tres o cuatro veces al año.