Si tienes que planificar una reforma integral, tan importante es saber lo que tienes que hacer como conocer qué errores son los más comunes y los que pueden hacer que tus obras acaben transformándose en una pesadilla.
Falta de planificación
La falta de planificación al llevar a cabo reformas integrales en Alcoy es uno de los problemas más habituales. Si no se tiene muy claro qué es lo que se quiere suele pasar que a mitad de la obra se nos acuerden cosas que necesitamos o pensemos que quedaría mejor de otra manera.
Llevar a cabo estos cambios cuando ya se ha comenzado con el trabajo y se cuenta con un presupuesto aprobado es complicado, ya que puede elevar mucho el precio y hacer que el tiempo de obra se prolongue.
Mala elección de la empresa de reformas
Cuando se piden presupuestos, a veces aparece uno que destaca por ser bastante más bajo que los demás. Muchas personas caen en aceptar este tipo de presupuestos sin hacer demasiadas preguntas convencidos de que han tenido mucha suerte al encontrar una ganga así.
Pero todos sabemos que nadie da las cosas por debajo de su valor y en las reformas no hay excepciones. Este tipo de presupuestos suelen encerrar trampas como materiales de ínfima calidad o personal muy poco cualificado, con lo que se logran resultados que dejan mucho que desear. Esto cuando no sucede que, a mitad de la obra, te expliquen que se han quedado cortos y que si quieres seguir con los trabajos tendrás que pagar más dinero.
No pedir factura
Otro error bastante común es acceder a pagar el dinero de la reforma integral en negro. Al tratarse de cantidades altas de dinero ahorrarse el IVA es, cuanto menos, tentador. Pero lo malo del caso es que si no se tiene factura no se tiene ninguna garantía.
Cuando se realiza una reforma integral, la factura es la garantía para que, si algo queda mal o se produce algún problema, la empresa se responsabilice de lo que haya sucedido y no solo repare aquello que haya quedado con defectos, sino que también se haga cargo de los gastos que esto pueda ocasionar. Por ejemplo, en caso de que una tubería recién puesta tenga una fuga de agua que cause daños a terceros o implique tener que levantar de nuevo el suelo nuevo.